Explorando sin parar…
Probablemente se ha fijado que a su hijo le encanta explorar desde que se despierta hasta que se duerme.
Está tan curioso de su entorno que no dejará de tocar, saborear y oler lo que esté en frente de ellos.
Explorará tanto que puede frustrar a los padres e incluso preocuparlos.
Es natural | |
---|---|
Lo primero que debe saber es: un niño, por naturaleza, quiere explorar. Nosotros como seres humanos somos curiosos y desde la niñez podemos observar esto. Sin embargo, se debe tomar en cuenta que su exploración debe realizarse en lugares seguros. Explorar propicia el desarrollo de su niño de varias maneras: |
|
- Desarrollo mental
Aprende sobre objetos, como funcionan estos objetos y la abstracción necesaria para solucionar problemas básicos.
- Desarrollo físico
Refuerzan habilidades motrices y desarrollan sus habilidades físicas como correr, brincar, caminar, pararse, gatear, sujetar, entre otros.
Un niño imita a sus padres y buscará hacer las cosas por sí mismos.
Aunque quiera ayudarlo, deje que lo haga solo por un momento. Debe tomar en cuenta que supervisarlos es muy importante en especial si hay objetos que puedan ser peligrosos.
A veces es necesario motivarlos.
Durante esta etapa son muy activos.
Crecer explorando…
Cuando su niño explora crece en muchos aspectos.
Al intentar entender lo que pasa a su alrededor y aprender sobre el mundo que lo rodea, su inteligencia crece.
Un niño que explora y pueda acudir a sus padres en medio de su exploración, si necesita ayuda, crece socialmente y emocionalmente.
También, tiene un crecimiento físico: moverse y coordinar desarrolla sus habilidades motrices.
Los padres deben supervisar, darles espacios seguros para explorar y dejar que intenten hacer cosas por sí mismos.